¿Existe de verdad el problema de acoso sexual en las empresas?
El problema del acoso es un problema invisible y a la vez frecuente en las empresas. Aunque no existen datos oficiales en España, según las estimaciones de las instituciones europeas una de cada tres mujeres podría ser víctima de acoso. Dentro de este grupo, solo el 8% denunciaría estos actos.
¿Cuáles son las obligaciones de las empresas en la materia de la lucha contra el acoso?
De acuerdo con la Ley Orgánica de Igualdad Efectiva de Mujeres y Hombres y la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, las empresas españolas tienen que proteger a sus trabajadoras y trabajadores frente al acoso. Estas obligaciones deben desarrollarse mediante la prevención, la tutela proactiva y la tutela reactiva.
La prevención consiste en el establecimiento de un código de buenas conductas y la redacción del Protocolo contra el acoso exigido por la Ley de Igualdad, negociado con la representación de las personas trabajadoras.
La tutela proactiva por parte de la empresa consiste en poner en marcha este protocolo en una situación de denuncia por acoso.
Además debería iniciar actuaciones que se engloban en la tutela reactiva, para disminuir las posibles situaciones de acoso.
¿Qué consecuencias conlleva para la empresa la inacción frente al acosO?
Las empresas que no reaccionan frente a las situaciones de acoso en su ámbito laboral pueden sufrir penas definidas por la Ley de Infracciones y Sanciones en el Orden Social.
Sin embargo, las consecuencias negativas no se limitan a su aspecto legal. El acoso sexual y por razón de género afecta también el ámbito laboral y tiene consecuencias negativas sobre la persona acosada como sobre su productividad.